¿De qué estás hablando? Eso es genial, estás haciendo eso.
1. Tu cerebro trabaja más eficientemente
2. Los niños aprenden
Si tiene o trabaja con niños, ¡sabe que casi nunca se callan! Pero eso es algo bueno. A medida que los niños crecen, usan su voz para imitar la conversación de adultos (bueno, eso no siempre es bueno). Pero aprenden la inflexión vocal, el vocabulario y la sintaxis al escuchar y repetir lo que dicen sus padres.
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3. Organizar pensamientos
En el mundo ocupado de hoy, tenemos un millón de pensamientos corriendo por nuestras cabezas en todo momento. Nuestros pensamientos se confunden en nuestras mentes y pueden volverse increíblemente abrumadores si no se controlan.
4. Lograr objetivos
Hacer una lista de tareas pendientes parece una gran idea, pero si la lista se hace demasiado larga puede ser abrumadora. No solo hablar de su lista de obligaciones ayuda a priorizarlas, sino que también hace que sus objetivos parezcan alcanzables.
5. Alivie el estrés
Dado que hablar contigo mismo te permite organizar tus pensamientos y priorizar tus obligaciones, tu mente no está constantemente acelerada, preguntándote cuándo tendrás suficiente tiempo para hacerlo todo.
6. Fomentar la autosuficiencia
Aquellos que hablan consigo mismos miran hacia adentro cuando necesitan ayuda para resolver un problema.
Fuente: 6 beneficios de hablar contigo mismo (No, no estás loco)
Y esta es una de mis escenas favoritas en los programas de televisión.
Howard: ¿Te estás escuchando a ti mismo?
Sheldon: Siempre me escucho a mí mismo. Es una de las grandes alegrías de mi vida.
