Especulación: resultaría ser un fracaso costoso.
- Las cámaras serían atacadas por vándalos y delincuentes que no deseaban observar sus acciones. Las cámaras tendrían que repararse y reemplazarse a un costo tremendo para el contribuyente.
- Sus operadores abusarían del sistema: se grabarían imágenes de personas que se desvistían, se duchaban y otros eventos personales. Finalmente, estas grabaciones llegarían a uno de los sitios de transmisión de videos de Internet y comenzarían las quejas y demandas públicas.
- El sistema atraparía a los funcionarios públicos que no realizaran su trabajo o que cometieran actividades poco éticas o ilegales # 1 – Las demandas civiles del público en general aumentarían a medida que las actividades que generalmente no se registran se registren. Defender estas demandas y pagar los asentamientos resultaría costoso para los municipios.
- El sistema atraparía a los funcionarios públicos que no realizaran su trabajo o cometieran actividades poco éticas o ilegales # 2. O las imágenes aparecerían como “desaparecidas” (lo que significa que tendrían que llevarse a cabo investigaciones para descubrir por qué ocurrió esto) o los sindicatos de funcionarios públicos se quejarían de que sus miembros estaban siendo atacados por el municipio en un esfuerzo por deshacerse de ellos.
- El sistema sería pirateado por extraños. El metraje se alteraría o mostraría de una manera poco halagadora. Esta piratería significaría que habría que gastar fondos adicionales para hacer que el sistema sea “más seguro” (una tarea imposible en sí misma)
Algunas ciudades de los EE. UU. Tienen y están utilizando sistemas de CCTV en algunas áreas. Por lo que entiendo, son un éxito mixto, en el mejor de los casos.