La vida tendría un significado totalmente diferente. La muerte es conocida, pero siempre “más tarde”. La vida es tentativa y efímera; la muerte es segura pero no predecible.
Tomamos decisiones, en parte, debido a limitaciones de tiempo. Muchas personas viven de esta manera, respetan la vida y la muerte. Si la muerte fue una sorpresa, alteraría algunos planes.
¿Nos retiraríamos antes? ¿Nunca nos divorciaremos? ¿Tomaríamos más riesgos? ¿Desaparecerían las religiones?
Se convertiría en una cultura desprovista de planificación para la muerte. Se correrían más riesgos como consecuencia.
- Si pudieras ser famoso durante 15 minutos, ¿por qué te gustaría ser conocido?
- ¿Cuál será mi vida si pierdo la pasión o desconfío de mí mismo?
- Si hoy fuera el último día de mi vida, ¿qué libro debería leer?
- ¿Cuál sería su plan de acción si se le dijera hoy que moriría exactamente en un mes?
- ¿Cuáles son los pros y los contras de una sociedad matriarcal? ¿Cuál sería el escenario en la India?
En una palabra, haría la vida bastante “extraña”.
Los cementerios pueden no ser tan elaborados en el futuro.