El procesamiento de la pantalla ocurre en la computadora donde el destinatario está leyendo el correo electrónico.
En otras palabras, ocurre en el cliente de correo, y la apariencia de los mensajes en el cliente de correo es controlada por el destinatario del mensaje, no por el remitente.
Si bien puede codificar un asunto con un conjunto de caracteres alternativo, consulte RFC 2047: MIME (Extensiones multipropósito de correo de Internet) Parte tres: Extensiones de encabezado de mensaje para texto no ASCII: no existe un estándar correspondiente para cambiar los colores.
Sería una mala idea agregar un color alternativo que podría ser imposible para una persona daltónica diferenciar del color de fondo de la pantalla. También sería una mala idea si el color de fondo coincidiera con el color exacto que seleccionó para su línea de asunto, ya que el asunto aparecerá en blanco.
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Por esta y otras razones, no espere que los clientes de correo no especializados apoyen esta idea en el corto plazo.
Nota: Muchos clientes de correo admiten que el destinatario pueda especificar mensajes para colorear basados en el contenido de la línea de asunto, el remitente o el contenido que contiene ciertas palabras. Esto se implementa como un “filtro de correo”, dentro del cliente. Esto también lo establece el destinatario, y el remitente no puede controlarlo, salvo mediante el uso de las palabras clave apropiadas en los campos correspondientes.