¿Por qué hablo tan suavemente?

Con más de veinte años de experiencia ayudando a oradores a desarrollar su confianza y habilidad. Yo diría que una voz tranquila es un hábito que se desarrolla al crecer. Es posible que sus padres o maestros le dijeran continuamente que “se callara”. Sé que sus padres hablaron en voz baja e inconscientemente modelaron su comportamiento.

El discurso tranquilo también se ve reforzado por su sistema de creencias. Cada vez que dices “Tengo una voz tranquila”, te estás programando para hablar en voz baja.

Comienza preguntándote a ti mismo. ¿Puedes hacer un ruido fuerte con tu voz? Por ejemplo, ¿alguna vez has gritado o gritado? La voz humana es capaz de un rango increíble, pero a menudo se acostumbra a usar una pequeña parte de ese rango.

La clave es comenzar a trabajar tu voz. Párate en un lugar vacío como un campo o un parque y practica hablar con alguien que esté parado a 10 pies de distancia, luego a 20 pies de distancia y luego a 30 pies de distancia. Puede encontrar más consejos sobre este y otros temas relacionados con la presentación en mi blog https://inter-activ.co.uk/Gavins…

Hablo suavemente y no planeo cambiarlo nunca. Yo era un maestro de secundaria de niños señalados por comportamiento y otros problemas antisociales. Les gustó mi voz. Los calmó. Lo llamaron Valium-voice. Mi voz suave ayudó a mis alumnos a relajarse. También hizo que pareciera que no iba a gritarles o avergonzarlos.

Se quejaban amargamente de lo ruidosos que eran los otros maestros y de que hablaban TODO el tiempo. No podían distinguir la diferencia entre lo que era importante y lo que hablaba el maestro.

Para mi profesión y mis alumnos, mi voz suave era una ventaja.

Hablar “suavemente” es una cuestión tanto del “volumen” de su discurso como de la “velocidad” de su discurso.

La respuesta de la audiencia que no puede escucharlo adecuadamente y / o no puede entender sus palabras es muy, muy perjudicial para la credibilidad de cualquier orador.

Le sugiero que se “lea en voz alta” a usted mismo o a un grupo de amigos o compañeros, para que su respuesta pueda ser una guía para su crecimiento.

Asegúrese de que al hacer esto, pronuncie y enuncie CADA PALABRA QUE LEE en voz alta para obtener el máximo efecto con el tiempo.

Tal vez estás siguiendo los pasos del ex presidente Theodore Roosevelt, quien fue citado diciendo: “Habla en voz baja, pero lleva un palo grande”.