No sé qué haría si fuera director por un día de una escuela primaria, pero sé lo que haría si consiguiera ese trabajo por un día en una escuela secundaria Jr. o Sr. . Traería oradores de Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos para contarles sus historias a los niños. Ese tipo de franca honestidad llegará a los niños y mantendrá al menos a algunos de ellos sin alcohol y drogas que de otro modo se habrían enganchado. También podría inspirar a algunos niños a denunciar a sus padres abusivos ante las autoridades.
En cambio, tenemos DARE en el que entra un policía y les dice a los niños que si beben o usan alcohol, el cielo caerá sobre sus cabezas. Bueno, sí, lo hará, pero casi siempre NO de inmediato. Entonces los niños salen y beben alcohol y usan y se divierten mucho. Esto los lleva a creer que todas esas drogas y bebidas alcohólicas de las que se nos advierte es una mentira. Cuando los niños se dan cuenta de que el cielo está cayendo sobre sus cabezas, ya es demasiado tarde. Ya son adictos.