Si la diferencia entre usted y su deseo sexual es notable o peor, sustancial, entonces hay una buena razón para creer que USTED lo clasificaría como un “adicto al sexo”, mientras que EL, por otro lado, podría clasificarlo como “no dispuesto” .
Existe, por supuesto, la posibilidad de que ÉL esté tan enamorado de USTED que su necesidad de usted se manifieste como un “deseo constante”. La adicción al sexo no es necesariamente algo malo solo porque contiene la palabra “adicción”. Si usted satisface todas sus necesidades, entonces eso tiene el aspecto de ser un matrimonio casi perfecto. El término es usado en exceso y muy a menudo por la persona cuyo nivel de participación es el menor de los dos.
Si las relaciones sexuales no interfieren con el trabajo, las obligaciones y la vida en general, entonces podría no ser más que niveles elevados de deseo. Es cuando ese nivel de deseo se extiende a las necesidades de otras mujeres, tus amigos, los miembros de tu familia o los animales de corral que se debe considerar un problema para TI.
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