Uno de sus problemas fundamentales puede ser que esté analizando su métrica de productividad en el día a día. En cambio, piense en la productividad en un horizonte de tiempo más largo, como por semana o incluso por mes.
Este es el por qué…
Sus ciclos productivos-improductivos me recuerdan un artículo que leí recientemente sobre el cambio de comportamiento:
La paradoja del cambio de comportamiento (James Clear)
- Estoy planeando hacer algo para personas con capacidades diferentes (sordos, ciegos, etc.) no recolectando caridad o contribución social, sino creando una oportunidad de trabajo. ¿Cuál es la mejor idea de negocio para el mismo?
- Soy una transexual sin valor y sin trabajo que está a punto de quedarse sin hogar. ¿Cómo puedo matarme?
- Soy un graduado de CS y acabo de ser reclutado por el centro de desarrollo Microsoft-India. Escuché muchas cosas malas sobre la cultura laboral de Microsoft, como la calificación relativa de los empleados, el apuñalamiento en el equipo por bonos, etc. ¿Es cierto?
- Soy daltónico y me temo que esto me impedirá ser un buen director de arte. ¿Me equivoco?
- Estaré en Alemania durante dos semanas con compañeros de trabajo (Ramstein AB). ¿Qué deberíamos ver durante el fin de semana?
Una de las tesis de este artículo se ilustra en este diagrama:
Yo diría que la productividad sigue el mismo patrón. Es muy posible que estés oscilando constantemente entre el agotamiento y la pereza : tus días altamente productivos te dejarán totalmente agotado, lo que hará que seas improductivo al día siguiente, con este ciclo constantemente yendo y viniendo.
Creo que esto es cierto para mí. Solía tener estos objetivos diarios en los que intentaba leer y / o escribir 4 horas al día o 20 horas a la semana … y solo podía alcanzar mi objetivo una vez cada pocos días, muy por debajo de mi objetivo semanal final . Sin embargo, cuando comencé a planear las oleadas mentales y el tiempo de inactividad, haciendo de 6 a 8 horas de trabajo un día y planeando para otros días tener solo 2 horas de productividad , pude cumplir mucho más mis objetivos semanales. ¡Mi pereza planeada funcionó a mi favor!
Tener en cuenta el tiempo de descanso mental es como tener días de trampa en su dieta: es contraintuitivo, pero en última instancia dará como resultado una mayor productividad general.