- Prepárate. Puede garabatear puntos en un pequeño trozo de papel; ocasionalmente, puede referirlo mientras habla (durante sus intentos iniciales, puede tener las notas, una vez que esté seguro de que puede evitarlo) Esto le ayuda a tener confianza.
- Ten confianza en lo que hablas. Ahora que está seguro de la parte del guión, sea valiente y hable.
- Siempre hable el idioma en el que habla con fluidez.
- Tener contacto visual con la audiencia. Mirar en la pared detrás o en el piso les quitará su atención, sin importar cuán bueno sea su contenido.
- Ten una buena postura corporal, tu gesto habla mucho. Párese derecho, puede mostrar movimientos de las manos en el medio, puede caminar o permanecer en el mismo lugar, pero no deje que sus piernas tiemblen cuando entre en pánico.
- Ten un buen control sobre tu voz. La modulación de voz es esencial mientras hablas.
- Nunca prepare un discurso largo y largo con palabras difíciles, datos estadísticos y líneas repetidas. Comience con una declaración sugerente o ingeniosa que atraerá a todos. Recuerde que sus líneas iniciales son muy importantes.
- Si comete un error, simplemente siga adelante. No sirve de nada entrar en pánico, está hecho, así que sacúdelo. Los errores pueden sucederle a todos.
- Dale un buen final. Algo que las personas siempre pueden recordar. Cada vez que hable, asegúrese de que las personas reciban algo valioso.
- Siempre mantén una cara agradable
- Finalmente, CREA en ti mismo y CONFÍA en Dios. Nada es imposible
¡Buena suerte!