Los robots actúan como están programados, y cuando escribes un programa tienes que explicar cómo hacer todo.
Tienes que decirle al dron cómo hacer acciones (como definir [con mucho detalle] qué es “apuntar”, por ejemplo, “rotar los motores A y B en grados X e Y, respectivamente”) y cómo manejar la ambigüedad y tomar decisiones ( puede tener, por ejemplo, algún tipo de rango de prioridad, y hacer que el dron ataque a los objetivos siguiendo una orden determinada, o para decidir automáticamente la prioridad de los objetivos en función de sus características [la distancia a él, su tamaño, su posición geográfica, o cualquier información que pueda derivarse de las lecturas de los sensores.])
También podría hacer algún algoritmo para explorar los objetivos, como “elegir un objetivo aleatorio de la lista de objetivos, moverse hacia él hasta alcanzar y atacar a todos los objetivos que aparecen en un radio de 400 mts. Repita hasta que termine”] y el orden sería otro .
Pero al final su programación debería indicar qué hacer.
Y bueno, si algún individuo o compañía es capaz de construir una máquina voladora no tripulada, seguramente pensaría definir el comportamiento de algo tan previsible como “qué hacer cuando dos objetivos están a la vista”, y seguro de que pueden decidir usar cualquier regla como “golpear al más verde primero” o “elegir al azar”, por lo que no puede haber una respuesta específica si no estamos hablando de una implementación específica de drones.
Pero con suerte un programador olvidó especificar ese comportamiento, el dron se vuelve loco, se ahoga y no se daña ningún objetivo.
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